El guardameta español del Liverpool fue motivo de una oferta desde el Arsenal por 20 millones de libras pero los Reds lo rechazaron en pleno proceso de venta del club.
El portero del Liverpol, José Manuel Reina, ha desvelado que estuvo cerca de marcharse al Arsenal el pasado verano pero su club, el Liverpool, entonces propiedad de Tom Hicks y George Gillett, frenó la operación debido a que se encontraba en pleno proceso de venta.
El internacional asegura que el conjunto entrenado por Arsene Wenger ofreció 20 millones de libras -algo más de 23 millones de euros- por él. Los dueños del Liverpool, a pesar de la pésima situación económica que vivía el club, rechazaron el ofrecimiento por miedo a enviar un "mensaje equivocado" a los potenciales compradores.
En su autobiografía, titulada 'Pepe', Reina reflexiona sobre su etapa en Liverpool, donde juega desde el año 2005. Los últimos tiempos han sido complicados, especialmente por la incertidumbre provocada por la crisis económica y la salida de Rafael Benítez, en mayo de 2010, sólo un mes después de su renovación.
"Pasé de la euforia a la depresión tras el Mundial, entonces me di cuenta de que el Liverpool se iba a ninguna parte. Cuando firmé mi nuevo contrato tenía la esperanza de que vendrían tiempos mejores pero no tardé en entender que eran promesas vacías. Me sentí traicionado", afirma un dolido Reina con los anteriores propietarios del club.
El portero se sintió "moneda de cambio" cuando supo la verdad del fracaso de la negociación entre el Liverpool y el Arsenal por él. "Ofrecieron una cantidad fenomenal para un portero pero el Liverpool la rechazó, no porque fuera demasiado bueno para salir, sino porque mi presencia era crucial para la venta del club".
El internacional asegura que el conjunto entrenado por Arsene Wenger ofreció 20 millones de libras -algo más de 23 millones de euros- por él. Los dueños del Liverpool, a pesar de la pésima situación económica que vivía el club, rechazaron el ofrecimiento por miedo a enviar un "mensaje equivocado" a los potenciales compradores.
En su autobiografía, titulada 'Pepe', Reina reflexiona sobre su etapa en Liverpool, donde juega desde el año 2005. Los últimos tiempos han sido complicados, especialmente por la incertidumbre provocada por la crisis económica y la salida de Rafael Benítez, en mayo de 2010, sólo un mes después de su renovación.
"Pasé de la euforia a la depresión tras el Mundial, entonces me di cuenta de que el Liverpool se iba a ninguna parte. Cuando firmé mi nuevo contrato tenía la esperanza de que vendrían tiempos mejores pero no tardé en entender que eran promesas vacías. Me sentí traicionado", afirma un dolido Reina con los anteriores propietarios del club.
El portero se sintió "moneda de cambio" cuando supo la verdad del fracaso de la negociación entre el Liverpool y el Arsenal por él. "Ofrecieron una cantidad fenomenal para un portero pero el Liverpool la rechazó, no porque fuera demasiado bueno para salir, sino porque mi presencia era crucial para la venta del club".
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