El entrenador argentino asumió su responsabilidad, luego de "tratar como un salvaje" al jefe de las obras de remodelación de la ciudad deportiva del Athletic de Bilbao.
![]() |
Bielsa aseguró que tuvo una acalorada discusión con el trabajador
Bilbao.- El
técnico argentino Marcelo Bielsa, del Athletic de Bilbao, informó hoy
de que se denunció a sí mismo por tratar "como un salvaje" al jefe de
obra de unas reformas en Lezama, la ciudad deportiva del club vasco.
Bielsa ofreció una rueda de prensa de 70 minutos, convocada "a título personal" y al margen del club, en la que sugirió la existencia de discrepancias con sus dirigentes, además de acusar de "estafa, robo y engaño" a la empresa que trabaja en la remodelación de Lezama.
Lo primero que llamó la atención, por insólito en el fútbol español, fue la confesión de que puso una denuncia contra sí mismo por su trato hacia el jefe de obra que trabaja en Lezama, con quien tuvo un altercado publicitado en los medios de comunicación, destacó DPA.
Según afirmó, las obras le dejaron "sin vacaciones" y haciendo llamadas "de cuatro horas diarias desde Argentina".
"Propuse un plan austero para remodelar Lezama. La planificación de obras tenía unos plazos de entrega y uno de ellos se cumplió el 2 de julio. Yo me reuní unas 30 horas con los responsables. Hacer la pretemporada en estas condiciones de Lezama me desprestigia como entrenador", comentó.
Bielsa siguió hablando de su enfado y cargó contra los operarios por realizar mal su trabajo "sabiendo que se hacía mal".
"El trabajo no es que no se terminara, sino que se hizo mal sabiendo que se hacía mal. Cuando vi como estaba, me indigné. Ofendí a la persona encargada y él me contestó también mal", relató.
Bielsa añadió que este malestar provocó una discusión acalorada que terminó así: "Con una denuncia autoinculpándome por el mal trato hacia el ingeniero encargado de las obras".
"Dijo que yo le golpeé, pero no puso ninguna denuncia presionado por la empresa o el Athletic. Yo se lo facilito", informó ante la incredulidad de los periodistas.
Y agregó. "Me indigné y me afectó porque tengo que asumir ante los jugadores las condiciones de trabajo de un plantel que vale 300 millones".
Según Bielsa, "las obras se hacían más por el interés de la empresa constructora que para los intereses del Athletic", y consideró lo hecho como "una estafa, un robo y un engaño".
El entrenador argentino no sólo cargó contra las obras de remodelación de Lezama, sino que afirmó que la directiva está fichando futbolistas que él no pidió, como Aritz Aduriz o Isma, aunque éstos le parecen refuerzos "importantes".
"Nunca hice una solicitud de jugadores, señalé las posiciones que se debían reforzar, que no son las de Aduriz e Isma", dijo.
Las profesiones de periodistas y entrenadores también recibieron la crítica de Bielsa: "Yo tengo muy mal concepto del periodismo y de los periodistas. Pero para que se queden tranquilos: tengo peor concepto de los entrenadores".
A final de la pasada temporada, y después de interminables debates y especulaciones, Bielsa renovó su contrato con el Athletic por una campaña más.
Bielsa ofreció una rueda de prensa de 70 minutos, convocada "a título personal" y al margen del club, en la que sugirió la existencia de discrepancias con sus dirigentes, además de acusar de "estafa, robo y engaño" a la empresa que trabaja en la remodelación de Lezama.
Lo primero que llamó la atención, por insólito en el fútbol español, fue la confesión de que puso una denuncia contra sí mismo por su trato hacia el jefe de obra que trabaja en Lezama, con quien tuvo un altercado publicitado en los medios de comunicación, destacó DPA.
Según afirmó, las obras le dejaron "sin vacaciones" y haciendo llamadas "de cuatro horas diarias desde Argentina".
"Propuse un plan austero para remodelar Lezama. La planificación de obras tenía unos plazos de entrega y uno de ellos se cumplió el 2 de julio. Yo me reuní unas 30 horas con los responsables. Hacer la pretemporada en estas condiciones de Lezama me desprestigia como entrenador", comentó.
Bielsa siguió hablando de su enfado y cargó contra los operarios por realizar mal su trabajo "sabiendo que se hacía mal".
"El trabajo no es que no se terminara, sino que se hizo mal sabiendo que se hacía mal. Cuando vi como estaba, me indigné. Ofendí a la persona encargada y él me contestó también mal", relató.
Bielsa añadió que este malestar provocó una discusión acalorada que terminó así: "Con una denuncia autoinculpándome por el mal trato hacia el ingeniero encargado de las obras".
"Dijo que yo le golpeé, pero no puso ninguna denuncia presionado por la empresa o el Athletic. Yo se lo facilito", informó ante la incredulidad de los periodistas.
Y agregó. "Me indigné y me afectó porque tengo que asumir ante los jugadores las condiciones de trabajo de un plantel que vale 300 millones".
Según Bielsa, "las obras se hacían más por el interés de la empresa constructora que para los intereses del Athletic", y consideró lo hecho como "una estafa, un robo y un engaño".
El entrenador argentino no sólo cargó contra las obras de remodelación de Lezama, sino que afirmó que la directiva está fichando futbolistas que él no pidió, como Aritz Aduriz o Isma, aunque éstos le parecen refuerzos "importantes".
"Nunca hice una solicitud de jugadores, señalé las posiciones que se debían reforzar, que no son las de Aduriz e Isma", dijo.
Las profesiones de periodistas y entrenadores también recibieron la crítica de Bielsa: "Yo tengo muy mal concepto del periodismo y de los periodistas. Pero para que se queden tranquilos: tengo peor concepto de los entrenadores".
A final de la pasada temporada, y después de interminables debates y especulaciones, Bielsa renovó su contrato con el Athletic por una campaña más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario