Cuando
Marcelo Bielsa asumió en Athletic de Bilbao, ni el hincha más optimista
podía imaginar lo que significaría la llegada del entrenador argentino
al club. Tras un irregular comienzo en la Liga, los anti-Bielsa se
relamían a la espera del fracaso del DT. Sin embargo, a fuerza de un
trabajo muy particular, de una mentalidad ganadora y de triunfos, el
Loco se ganó el corazón de todos los hinchas, que, día tras día, siguen endiosando la figura del ex técnico de la selección argentina.
Ayer,
tras un contundente triunfo ante Manchester United por los octavos de
final de la Europa League, la afición vasca volvió a festejar de la mano
de Bielsa. Desde que el Loco llegó al club, a mediados de 2011, el
Bilbao pelea en la Liga por un lugar en competencias europeas, accedió a
la final de la Copa del Rey (la jugará el 25 de mayo, ante Barcelona,
en el Vicente Calderón) y, como ya contamos, avanzó a los cuartos de
final en el segundo torneo internacional más importante del continente
europeo.
"La victoria nos habilita a seguir en la competencia, pero
cuando el rival es Manchester no se puede ignorar esa circunstancia. Por
eso prefiero reunir las dos cosas", aseguró el Loco tras el triunfo 2-1
ante el United (en la ida, como visitante, el Bilbao había ganado en el
mítico Old Trafford por 3-2 con una lección de buen fútbol).
El
Loco, en una extensa conferencia de prensa, como nos tiene
acostumbrados, señaló que el partido fue "un espectáculo en la cancha y
las tribunas" y, sin sobresaltos, sostuvo: "Esa efervescencia y
compromiso de la afición no sorprende a nadie, va impreso en la
identidad del club".
Por último, y lejos de su estilo medido a la hora de declarar, Marcelo se despachó: "Merecemos disfrutar este momento".
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